Antes de poner en marcha cualquier estrategia es imprescindible realizar un diagnóstico de la empresa y su entorno.
Seguro que en más de una ocasión has oído hablar del análisis DAFO o incluso lo has puesto en práctica. Si como empresario deseas tomar decisiones estratégicas esta herramienta te será muy útil para aprovechar las oportunidades y fortalezas de tu empresa y prepararte contras las amenazas teniendo en cuenta tus debilidades.
El DAFO se apoya en dos análisis básicos, el interno y el externo de una empresa.
El análisis interno consiste en detectar tanto las fortalezas como las debilidades de la compañía:
– FORTALEZAS: en este punto deberás describir los recursos con los que cuentas y los puntos a favor que tienes. Tu ventaja competitiva, qué es lo que mejor sabes hacer, innovación, ventajas en precio, buena imagen corporativa, etc.
– DEBILIDADES: está formado por todos aquellos factores en los que estás por debajo de la competencia. Falta de conocimiento en alguna área, costes superiores a los competidores, menor rentabilidad, etc.
El análisis externo que trata de detectar y analizar las amenazas y oportunidades que presenta tu mercado:
– OPORTUNIDADES: entrada en nuevos mercados, nuevos nichos, ampliar la gama de productos, etc.
– AMENAZAS: aquellos factores que ponen en peligro la supervivencia de la compañía. Si al realizar este análisis detectas una debes trabajar para solucionarla a tiempo y que no te afecte.
Una vez considerados estos 4 aspectos podrás hacerte una idea de la situación actual de la empresa para así definir una estrategia acertada.
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Fotos: Pixabay
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